Isaías 59:1 – He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; «La mano del Señor no se ha cortado para salvar»
¿Por qué no decimos que Dios escucha nuestras oraciones siempre? Nos dejamos vencer por el diablo, nos debilita la fe en Cristo. Dios es el Señor del universo. Él nos creó y somos ovejas de su rebaño. Es decir, somos sus hijos, cuida de nosotros, aunque descarrilemos, Él está ahí para levantarnos otra vez y seguir nuestro camino con Él. Levante sus manos hacia el Señor; Su mano no se ha cortado para salvarnos, él sigue haciéndolo y seguirá. Él llamará a sus ovejas, necesitamos una fe ciega, que no necesita de los ojos para oír y seguir al pastor, sus orejas están dotadas para oír y escuchar las indicaciones del pastor. Él es Dios milagroso y todopoderoso, Amén.