¿Cómo tratar a tu esposa?
¿Sabías que hay mandamientos bíblicos para los maridos acerca de cómo tratar y amar a sus esposas? Los esposos tienen la responsabilidad de amar y honrar a sus esposas y nos gustaría ayudarte a entender esto a través de las referencias de las Sagradas Escrituras:
Efesios 5:25 – Para los maridos, eso significa: ame cada uno a su esposa tal como Cristo amó a la iglesia. Él entregó su vida por ella
Esto significa que debes estar dispuesto a arriesgar tu vida para ayudar o salvar a tu esposa. El amor de Cristo por la iglesia no tiene límites; no se guarda nada. Él dio su vida por la iglesia – antes de que lo amasemos. «Mientras aún éramos pecadores, Cristo murió por nosotros». Su amor no depende de tu amor por Él; Su amor es incondicional. Bajo el liderazgo y la ayuda de Dios – ama a tu esposa como servidumbre – como dar tu vida a Dios. Amar a tu esposa debe ser tu primer deber como marido.
Efesios 5:28 – La misma manera, el marido debe amar a su esposa como ama a su propio cuerpo. Pues un hombre que ama a su esposa en realidad demuestra que se ama a sí mismo.
Las necesidades de tu esposa, ya sean financieras, físicas, emocionales o espirituales, deben recibir toda tu atención. Siente el dolor y las enfermedades de tu esposa y regocíjate en su salud y felicidad como si su vida fuera tuya.
1 Pedro 3:7 – De la misma manera, ustedes maridos, tienen que honrar a sus esposas. Cada uno viva con su esposa y trátela con entendimiento. Ella podrá ser más débil, pero participa por igual del regalo de la nueva vida que Dios les ha dado. Tratenla como es debido, para que nada estorbe las oraciones de ustedes.
La Biblia dice que si descuidamos este mandamiento, nuestras oraciones no serán escuchadas. Ser considerado significa deshacerse de cualquier hábito irritante. Cuando tu esposa necesita de tu ayuda muéstrale tu amor y se siempre considerado con sus necesidades y deseos.
Colosenses 3:9 – No se mientan unos a otros, porque ustedes ya se han quitado la vieja naturaleza pecaminosa y todos sus actos perversos.
Las mujeres a veces son más sensibles que los hombres, así que ten en cuenta que las palabras ásperas, las miradas enfadadas, los tonos irritados de voz y la impaciencia afectarán profundamente a tu esposa. Recuerda que ella es un don precioso que Dios te ha dado y que siempre debes agradecer por ella.
Proverbios 5:18 – Que tu esposa sea una fuente de bendición para ti.
Alégrate con la esposa de tu juventud.
Proverbios 5:20 – Hijo mío, ¿por qué dejarte cautivar por una mujer inmoral o acariciar los pechos de una mujer promiscua?
Un hombre no debe estar interesado en otras mujeres cuando tiene una esposa. Un marido debe estar completamente satisfecho con la compañía de su esposa. Si un hombre pide ayuda a Dios podrá descubrir la verdadera belleza de la personalidad de su esposa. Este es el verdadero espíritu de verte cautivado por tu esposa.
Proverbios 31:28-29 – Sus hijos se levantan y la bendicen.
Su marido la alaba: Hay muchas mujeres virtuosas y capaces en el mundo, ¡pero tú las superas a todas!».
Hebreos 13:4 – Honren el matrimonio, y los casados manténganse fieles el uno al otro. Con toda seguridad, Dios juzgará a los que cometen inmoralidades sexuales y a los que cometen adulterio.
Jesús dice que «las miradas lujuriosas son adulterio.» (Mateo 5:28) Esto es similar a «donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón…» (Lucas 12:34). No atesores lujuria en ningún área de tu vida. Deniega el acceso a tu corazón. Mantén tu matrimonio puro, entrenando tu corazón y tus ojos para serles fieles a tu esposa. Tu matrimonio cosechará enormes beneficios si lo haces y esperamos que dure toda la vida.
Proverbios 18:22 – El hombre que halla esposa encuentra un tesoro,
y recibe el favor del Señor.
Sólo piensa en lo solitario que estarías sin una esposa. Adán estaba incompleto, así que Dios le dio una esposa. Tienes una compañera para toda la vida y una amiga todos los días. Agradece a Dios por esto y ora por ella diariamente.
Mateo 19:5 – —Y agregó—: “Esto explica por qué el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su esposa, y los dos se convierten en uno solo”.
Trata de mantener la chispa en su matrimonio y trabajad juntos como un equipo. Tu esposa es más importante que cualquier cosa o cualquier persona, excepto Jesucristo. Permaneced unificados y se uno con tu esposa, Amén.